Silencios...

El… Ella… solían ser uno, hoy son dos.

El… Ella…
Sobrevivían al frió del a relación calentándose con los restos que aun llevan de los momentos bien vividos… fríos que les dejan inmovilizados con respecto a si mismos…

El… Ella…
Abrieron su puerta al silencio, al mutismo… ven su relación con un vago agradecimiento difuso y lineal… in sentimiento de responsabilidad y compromiso engrandecido por un pasado casi olvidado.

El… Ella…
Entre mas fieles le son a la sociedad, mas infieles son asi mismos. Y es que la vida se lleno de anécdotas cada vez mas ajenas que propias… su separación llego hace años… pero… acaso la vieron llegar?....

El… Ella…
Porque unidos y tan solos?... sucedió cuando dejaron de estimular los sentidos, abandonando las pequeñas cosas que hacen reír… que hacen enamorar

Hoy El y Ella…
Lo comprendieron, volvieron a ser niños, encontrando animales en la nubes del cielo, haciendo grandes buches de agua y lanzándolos al infinito buscando la riqueza absoluta de volver a ser feliz.
Y es claro, porque sólo cuando se está enamorado simplemente reímos?... lo pasamos de los mejor cocinando algo entre arrumacos y guisantes.

Hoy El y Ella…
Simplemente dejaron de ser adultos y se convirtieron en niños grandes… así cada instante se cambio a un recreo de dos… la exaltación de niños borro de un tirón la sensatez de adultos.

El y ella solían ser dos… hoy son uno.

(Por eso brindo, por El, por Ella, porque me gusta reir, ver, oler, saborear, tocar… experimento simplemente el bienestar de pasearme por mis propias locuras infantiles, locuras que aun mantengo).